Marcelina Meneses y su hijo
El 10 de enero pasado se conmemoró en el Parque Avellaneda el Día de la Mujer Migrante, el encuentro se realizó por la iniciativa de la Dirección General de la Mujer y entre las actividades que se desarrollaron en el Antiguo Tambo hubo una muestra fotográfica denominada “Los caminos de la migración en clave femenino” cuyas realizadoras retrataron a diferentes colectividades .
Carito Contreras (Colectividad peruana y uruguaya), Geraldine Parola (Colectividad ecuatoriana y paraguaya), Carla Barriga (Colectividad boliviana), Silvina Di Caudo (Colectividad gallega), hubo proyección de videos referentes a las diferentes migraciones de mujeres y finalmente el Grupo Cultural Autóctono Wayna Marka expuso la danza y la música de la cultura Qulläna.
Desde la Dirección General de la Mujer, señalaron que “ las actividades se realizan con el objetivo de concientizar y sensibilizar a la sociedad sobre los aportes que brindan otras culturas y entendiendo que valorar la diversidad cultural permite enriquecer la propia cultura, nutriéndonos de otras experiencias, saberes y conocimientos abonando a la construcción de una sociedad inclusiva que garantice los derechos de todos”, también se resaltó , la plena vigencia de la línea gratuita de atención inmediata 0800-666-8537, que funciona las 24 horas todos los días del año y brinda asistencia especializada, orientación y derivación tanto a las mujeres víctimas de violencia de género, como a los niños y niñas víctimas de maltrato y abuso infantil.
A partir de la sanción de la Ley Nº 4409 en la Legislatura Porteña, se declara el 10 de enero como el “Día de las Mujeres Migrantes” en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La elección de la fecha busca homenajear a Marcelina Meneses, d e nacionalidad boliviana, que el 10 de enero de 2001 fue arrojada del tren Roca, entre las estaciones de Avellaneda y Gerli, junto con su bebé Joshua Torrez de 10 meses de edad tras haber sido insultada gravemente, un crimen que primero intentaron hacer pasar por accidente hasta que un testigo se animó a declarar y contó la realidad de los hechos.
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