Linea Oeste

En la Ciudad, nueve escuelas que figuran como "en ejecución" ni siquiera tienen empezadas las obras de construcción

21/04/2019
En la Ciudad, nueve escuelas que figuran como

De acuerdo a la página de internet oficial del Gobierno de la Ciudad, nueve escuelas nuevas se encuentran en construcción. Sin embargo, en los terrenos donde estas escuelas deberían estar no se ve que hayan siquiera comenzado las obras. Así, a los problemas edilicios, la falta de gas y las ratas que han sido vistas en escuelas porteñas, se suman obras incumplidas.
Pese a que estamos hablando del distrito más rico del país, el sistema educativo porteño tiene enormes problemas a nivel de infraestructura, lo que tiene como consecuencia, entre otras falencias, que en el presente año lectivo cerca de 22.000 chicos se hayan quedado sin vacante en las escuelas públicas de la Ciudad; en tanto que desde el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta se sigue prometiendo la construcción de 54 nuevos establecimientos educacionales, como parte del “Plan de Transformación Educativa” que impulsa el Gobierno de “Cambiemos” en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. No obstante, de acuerdo a la propia página web oficial del Gobierno porteño, solamente fueron completados tres de los ocho polos educativos y 17 de las 30 escuelas con salitas de tres años prometidas durante la campaña de Rodríguez Larreta. Así, a las falencias en términos de infraestructura educativa se suma la problemática de las obras: a mediados del mes de marzo hubo un derrumbe en una escuela en construcción en Villa Soldati, con un saldo de cinco trabajadores heridos, como informamos oportunamente a través de este medio.
Las nueve “escuelas fantasma” que figuran como “en ejecución” en la página web del Gobierno, no son otra cosa que terrenos en los que todavía no se ha llevado a cabo obra alguna. Entre estos, se encuentran el de Basualdo 1753, en Mataderos, y nada menos que tres terrenos de Villa Lugano (una de las zonas más carenciadas de la Ciudad): Av. Eva Perón 7449, Av. Castañares 6500, y en la esquina de las calles Piedrabuena y Zuviría. También hay terrenos en estas condiciones en los barrios porteños de Villa del Parque, Parque Patricios, Pompeya y Balvanera. “Curiosamente”, no figuran en esta lista barrios como Recoleta, Barrio Norte ni Belgrano.
De acuerdo a la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), lo que motiva los problemas a nivel de infraestructura y mantenimiento en los establecimientos escolares de la Ciudad es, como era de esperar, el salvaje ajuste presupuestario impuesto desde el gobierno porteño a la educación. En efecto, desde el año 2013 el presupuesto destinado a educación viene cayendo en picada en la Ciudad, y sólo a lo largo de la gestión de Rodríguez Larreta cayó un 15%, según un informe de la propia UTE.
De manera paralela, desde 2012 se multiplicó por seis el gasto en deuda pública en la Ciudad de Buenos Aires. Y aunque el presupuesto de $55.641 millones que fuera aprobado para el corriente año en educación representa un incremento del 28% respecto al del año pasado, lo concreto es que dicho aumento no alcanza siquiera a compensar las escandalosas cifras inflacionarias del último año, ni mucho menos para solucionar los gravísimos problemas que debe enfrentar en la actualidad la educación pública porteña. Como si todo esto fuera poco, el presupuesto de este año tiene un marcado ajuste en materia de infraestructura y mantenimiento, el que llega a un 42% respecto al presupuesto previsto originalmente.
Alejandra Bonato, quien se desempeña como Secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente del Trabajo de la UTE, declaró en relación al derrumbe de la escuela de Villa Soldati: “lo que pasa es que ahora están muy apurados con hacer estas 54 escuelas por razones obvias: estamos en un año electoral. Entonces, ordenaron poner hormigón y continuar con la obra a pesar de que era un día de lluvia y así fue cómo se produjo el derrumbe”. Asimismo, cabe señalar que solamente cuatro de los establecimientos escolares construidos son realmente nuevos. Los demás son simples relocalizaciones de escuelas ya existentes hacia nuevos edificios. “El problema es que si bien así se resuelve o mejora el problema edilicio, no resuelve el déficit de vacantes. Pero no les importa, ellos quieren la foto en la escuela nueva y punto”, añadió Bonato, para luego afirmar que “en el Polo Mugica, en Retiro, había tres escuelas: inicial, primaria y media. Entonces, ellos mudaron estas tres escuelas hacia nuevos edificios pero no son nuevas escuelas”. Aunque la referente gremial admitió que el nuevo polo educativo incrementará el número de vacantes para dicho barrio en los niveles inicial y primario, dio a conocer su preocupación en relación a la cantidad de grados que habrá en la escuela primaria: “Va a ser la única primaria en toda la ciudad que va a tener cinco secciones de grado y un solo director. ¿Cómo conducís una escuela con 35 grados? Tampoco tienen en cuenta la realidad del barrio, porque no es lo mismo conducir una escuela en Palermo que en la Villa 31. Lo hemos hablado con la Dirección de Educación Primaria y nos dijeron que no es una decisión que esté en sus manos”. Asimismo, la Secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente del Trabajo de la UTE expresó que: “ninguna de las escuelas se entregaron con gas”, y que inclusive muchas de ellas fueron entregadas con instalaciones de luz provisorias, las mismas usadas para la obra, como en el caso del Jardín de Infantes N° 11, sito en Venezuela al 3200, del barrio de Balvanera. 
Por su parte, Laura Marrone, legisladora del Frente de Izquierda y de los Trabajadores, manifestó que aunque las escuelas de reemplazo “mejoran las condiciones de habitabilidad”, no llegan a resolver el problema de fondo: “estamos ante una realidad en la que por más que se hayan construido esas escuelas, la falta de vacantes en la ciudad hace años es muy grave y no se soluciona. Acá hace falta una decisión de inversión del Estado en infraestructura educativa que no es la que está teniendo como prioridad en este momento el gobierno”, añadió Marrone, para luego puntualizar que “el gobierno de Rodríguez Larreta licitó una obra por 2800 millones de pesos para el mantenimiento de parques y macetas de los próximos tres años y 2000 millones para veredas. Con eso construimos nuevas escuelas y resolvemos el problema de las vacantes, pero esa no es la prioridad de este gobierno”.
Bonato, a su vez, denunció que “el caso de Santo Domingo 4050 es escandaloso y demuestra que no sólo no conocen el sistema educativo, sino que tampoco conocen la ciudad. Cualquiera sabe que en Pompeya pasa por abajo el Riachuelo. ¿Qué pasó? Ahí pretendían hacer una escuela con sótano. Entonces, cuando empezaron a cavar salió agua para todos lados. Ahora no solamente tuvieron que cambiar todo el proyecto sino que además tuvieron que poner pilotes de 22 metros de profundidad para llegar a la tierra y ver si sobre eso se puede construir una escuela que no se hunda dentro del Riachuelo”. 
Asimismo, la referente sindical aseguró que el problema principal en lo que respecta a infraestructura y mantenimiento es la situación de total abandono de que son víctimas las demás escuelas públicas porteñas: “como están apurados con las obras por el año electoral, están dejando desoladas las otras escuelas de la ciudad que también tienen problemas graves de mantenimiento e infraestructura. Si una casa hay que mantenerla permanentemente, imaginate un edificio escolar, que está habitado por 400 personas todos los días. Tenemos ventiladores y techos que se caen, puertas y paredes rotas, problemas con las instalaciones de luz y de gas, escuelas que se inundan. Y no hay una política de mantenimiento y prevención. Si no hubo una tragedia en las escuelas de la ciudad hasta ahora, fue por suerte. Y no podemos depender de la suerte”.

Redacción Línea Oeste


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