El Gobierno de la Ciudad organizó una reunión de vecinos el 5 de noviembre a las 18 hs. en las instalaciones del club Vélez Sarsfield, aunque la invitación  decía: “  Te invitamos a una reunión de cocreación para conversar sobre los eventos masivos que se realizan en el barrio , queremos escuchar tus ideas para mejorar la calidad de vida y convivencia en el mismo. Queremos fomentar el dialogo y el trabajo conjunto para que las políticas públicas reflejen las necesidades de la comunidad , los vecinos hace décadas sostienen que no hay nada que crear  solo piden que se respeten y cumplan las leyes vigentes.

 Participaron vecinos de las Comunas 9 y 10 y funcionarios de  diferentes áreas del Gobierno porteño : Seguridad, Eventos Masivos, DialogandoBA, Comunas 9 y 10,  Participacion Ciudadana ,  BAtransito,  DalePlay Empresa Eventos.

  Se organizaron mesas de trabajo con los vecinos que debieron anotarse previamente y   

las quejas de los vecinos no sorprenden a nadie ya que hace muchos años las vienen realizando sin ser escuchados.

Los temas sobre los que se explayaron fueron :  los excesos que comete la empresa organizadora al vallar las veredas con demasiada anticipación obstaculizando la libre circulación en el barrio, incluso han llegado a amurarlas  en las vereda y ya ha habido situaciones de caída de vallas que han puesto en riesgo la salud de los vecinos. Se manifiestó que el Club sólo tiene interés en obtener ganancias y los perjudicados son  los vecinos.

Expresaron sentirse   prisioneros en sus propias  casas y teniendo que programar su  vida según los intereses del club.

Manifestaron que el Gobierno de la Ciudad es el responsable de controlar que se cumplan las leyes como la de la prohibición de fuegos de artificio, contaminación sonora y todos los severos inconvenientes que traen los recitales masivos en el los barrios aledaños al club.

Otra de las quejas tuvo que ver con los  micros con efectivos policiales que estacionan en la puerta de las casas de los vecinos con el motor encendido por 8 horas para tener la calefacción o refrigeración marchando.

Los vecinos se quejaron de   la suciedad que queda luego de partidos y recitales y se mencionó que la gente orina en las veredas y frentes de casas.

Con respecto a la gente que hace  fila por muchas horas sin disponer de baños químicos,  un vecino planteó la brillante  idea de  que  esperen dentro del club hasta la hora del recital.

También hubo quejas por  las pruebas de sonido nocturnas durante días de semana sin tener en cuenta que la gente debe descansar, protestaron por las vibraciones en los edificios cercanos que produce el ruido  de los parlantes, más allá del daño a la salud auditiva y al sistema nervioso de todos los que padecen este tormento de vivir cerca del club Vélez.  

Vecinos del Barrio Kennedy se quejaron por  los  grupos electrógenos de gran tamaño pertenecientes al club, que están apoyados contra la pared de sus viviendas y deben  soportar  el sonido de los  motores.

Otro motivo de queja fue el problema que surge en los horarios de salida de los alumnos del colegio de Vélez, ya que  los padres estacionan hasta en 3 filas taponando las calles y las rampas para discapacitados.

 Los funcionarios expresaron que elevaran  las  quejas y serán tratadas   los distintos organismos del Gobierno de la Ciudad y se prometió otra reunión de este tipo para el próximo mes.

                                          Redacción Línea Oeste